“El Alto es uno de los centros donde se han asentado muchos narcotraficantes, por la facilidad que tienen de llegar y adquirir los insumos o sustancias químicas para la fabricación de la cocaína”, sostuvo Nina, según un reporte de la red ATB.
En la urbe alteña se descubrieron y destruyeron en estos últimos meses varias fábricas de cocaína clandestinas. Dijo que los narcotraficantes optaron por instalar laboratorios artesanales para refinar o cristalizar la droga que proviene de las dos regiones mencionadas, de donde migran los traficantes de cocaína.
Centenares de sacos de plástico llenos de coca triturada o restos de desechos químicos son encontrados a menudo en las orillas de los ríos o en lotes baldíos de los barrios alejados de El Alto.
“Tenemos que lograr una concienciación de la colectividad. Requerimos la información de la comunidad, deben colaborar todos en contra de esta amenaza (cocaína) que está destruyendo a las sociedades. La gente debe denunciar cualquier actividad sospechosa relacionada al narcotráfico”, dijo Nina.
En el último tiempo, también
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